REMOTHERED: TORMENTED FATHERS | OPINIÓN



Remothered: Tormented fathers introduce a Rosemary Reed, una terapeuta que va a visitar al señor Felton en su hogar, tras haber recibido tratamientos fallidos en busca de una cura para su enfermedad, y que ahora está al cuidado de su enfermera Gloria.  Allí no solo interroga el estado de salud del anciano, sino también la desaparición de su hija Celeste y la relación con “Jennifer”. Felton enfurece y echa a la doctora Reed. Sin embargo, ésta vuelve a adentrarse a escondidas, para investigar.
La historia es el punto fuerte de este survival horror. Algo intensa pero no rebuscada. Distinta, contada de una manera simple, y que a la vez genera ganas de analizar qué pasó realmente, y quién es quién en la mansión Felton.



Resultado de imagen para remothered tormented fathers


Si bien la ambientación está bien lograda, Stormind games no termina de hacer uso completamente funcional de sus recursos. Esto hace por ejemplo que a las pocas veces que Rosemary se encuentra con un enemigo, ya no se lo viva con miedo, sino con algo de frustración.  Sumado a que los sonidos que hacen los antagonistas para que nos percatemos dónde están, no son del todo envolventes. Por lo que terminan confundiendo sin querer, y a la vez, no dan la posibilidad de utilizar como corresponde los objetos de distracción.
Otro aspecto negativo es el sistema de guardado. La primera parte se consigue mediante espejos ubicados en puntos específicos del lugar. Sin embargo a medida que la historia progresa hacia lugares donde no sería lógico tener espejos, no queda otro medio que el guardado automático. Por lo que se pierde el control en ese sentido.

Se destacan además de la historia, la interfaz, las actuaciones de voz y los diálogos. Un sobresaliente es la actitud de Rosemary de principio a final. Sus sollozos, plegarias y movimientos que aunque mecánicamente no aparenten ser tan naturales, tienden a que Rosemary se agazape vulnerable, expresando su temor constante. Aportando al realismo y pudiendo identificarse con ella. Además, las cinemáticas están desarrolladas en los momentos justos y no se abusa de los screamers. 




Es un juego atrapante desde el principio, sin mucha dificultad para avanzar. Con una duración acertada y buena dinámica que tropieza sobre el final. Quizás haya ocasiones en las que técnica y argumentalmente falle; pero nada que Stormind games no pueda pulir en las dos entregas restantes de ésta trilogía que hace acordar a grandes retros del terror.