La premisa de Vampyr a simple vista, es simple: Jonathan reid es un médico que
tras volver de la guerra a su ciudad de Londres, es mordido por un vampiro. Y ahora está
en la disyuntiva entre salvar a la gente, o matarlos para alimentarse de su
sangre . Encima Jony no gana para disgusto: la ciudad está inmersa en una epidemia conocida
como la Gripe Española.
La moralidad define
el juego. Es decir, que la
acción depende de tus decisiones como humano o como vampiro. Elige tu propia
aventura versión infectocontagiosa, de la que no hay marcha atrás. Porque el juego tiene el re putísdichoso
guardado automático y solo en una ranura. O sea, que una vez que hagas tu
elección en momentos específicos, o vayas resolviendo tu modo de juego sobre la marcha, es así como va
a quedar hasta el final. Si querés probar otro modo u elección, vas a tener que
empezar de nuevo. Qué hermoso sistema...
En fin, el juego tiene
acción, aventura, sigilo, investigación, todo trabajando como engranajes
funcionando a la perfección cual relojito. Pero lo que mueve ésta composición
es algo clave: los dialogos.
Hay MUCHO para leer. Una gran parte del tiempo lo vamos a ocupar hablando con
los tantísimos personajes que hay. Y cada uno con un actor de voz. Así que el
hecho de que tengan interpretación con voz humana, lo hace más ameno al tema. Sin embargo es fundamental en el desarrollo;
por lo que tenés que tener bastante paciencia en éste sentido.
Hay algo en específico que no me gustó desde el principio, y es la velocidad de
movimiento de Jony. Camina como si estuviese corriendo, y entorpece mucho la
naturalidad cuando investigamos espacios reducidos. A ésto le sumo que hay
varios bugs y
muchas veces los personajes tienen expresiones incoherentes con lo que hablan.
Otro punto en desventaja es la uniformidad de las locaciones.
A lo largo del recorrido, vamos a desplazarnos por diferentes barrios; en
general, todos muy lúgubres con una misma paleta de colores. Hubiese estado
bueno que marcaran más la diferencia entre los sectores para ayudar a que no
sea tedioso ir de un lugar a otro. Ojo, que las ambientaciones son buenas. Pero
podrían haber sido mejor teniendo en cuenta que la historia transcurre en
Londres, abatida por una enfermedad, amenazada por la presencia de vampiros y
en zonas tanto de clase alta como marginales.
Por otra parte, si hay algo que se destaca olímpicamente, es el sonido. La actuación
de voces, los ruidos, el sonido ambiente y sobretodo, la musicalización. Todo
es magnífico.
Otro tema a favor son los
elementos RPG, que a mi me parecieron muy oportunos. Jony empieza siendo
un neófito,
un vampirito de pecho. Pero a medida que va adentrándose en la ciudad,
conociendo sobre la cultura y la historia vampírica, y a medida que va pasando
el tiempo y con él, la propagación de la enfermedad que acecha, es lógico que
adquiera más experiencia.
Es un juego muy
atractivo. Personalmente, no lo rejugaría. Al menos no en un buen tiempo. Aunque
sea una joyita artísticamente, es medio denso por el tema de la cantidad enorme de
diálogos. Pero no me mal interpreten. Si se le tiene la paciencia suficiente,
se puede valorar como se lo merece. Dontnod tuvo excelentes intenciones con
Vampyr, y se nota ✔.